Círculo vicioso

Es curioso como actúa el cerebro. Por la noche estoy cansado, me siento débil y por lo tanto más propenso a estar triste. Por la mañana sin embargo, cuando me levanto y ya he desayunado mi mente empieza a dar vueltas sobre todo lo que me había puesto triste la noche anterior, y empieza a intentar poner solución a todo ello, con gran vitalidad y optimismo, haciendo planes sin parar, hoy haré esto y lo otro y esto otro cuando salga de trabajar, tengo que solucionar esto, lo otro y lo de más allá, por mi, por mi bien. Y así me voy a trabajar, con la cabeza bien alta y optimista a más no poder. Pero amigos... empieza el trabajo y empieza el desánimo. Luego con el día a cuestas, con los problemas y el trabajo realizado durante todo el día durante 10 horas sentado en una silla con ruedas giratorias enfrente de un Mac... cuando salgo de trabajar, agacho la cabeza para mirar mis piernas cansadas y pienso... ¿qué tenía que hacer? ah.. sí... bueno... ¿qué hago? ufs.. que pereza... bueno... lo haré mañana que estaré menos cansado, voy a acostarme tempranito y mañana estaré nuevo...